Proverbios 19:13
“DOLOR ES para su padre EL HIJO NECIO, Y GOTERA CONTINUA LAS CONTIENDAS de la mujer.”
Los problemas en el hogar siempre serán uno de los retos que se debe enfrentar. Lograr un diálogo productivo con una buena solución es la meta.
No todos los miembros de la familia pueden tener una disposición para hablar. Qué difícil es dialogar con el necio o con una persona conflictiva, parece una tarea improductiva que no tiene remedio. Pero sabemos que debemos hablar, ¿qué hacer?
En el Libro de Ester tenemos la historia de una esposa que tenía un serio problema que enfrentar con su esposo. Ester sabía muy bien que el acercarse para hablar con su esposo podría costarle la vida (Ester 4:11), pero entendiendo la importancia de esta conversación estableció un plan que favoreció este acercamiento:
- Oración ferviente: Pidió a su tío Mardoqueo que ayunara, lo que en el contexto judío esto podía incluir oración. No solo su tío oraría, sino todos los demás judíos de la ciudad; este tiempo de ayuno incluyó a Ester y sus doncellas (Ester 4:16). Una buena idea siempre será orar, pero la oración de Ester no fue una sencilla oración, ellos pasaron 3 días de ayuno. Nuestra oración debe ser ferviente, y si es posible, busque otras personas cercanas que oren con usted.
- Motivar la conversación: La reina Ester, para preparar la conversación y enfrentar el problema invitó a su esposo, el rey, a una cena. En dicha cena el rey esperaba escuchar la petición de Ester (Ester 5:4). Busque medios y momentos propicios que le permitan hablar. Una de las equivocaciones que frecuentemente se dan es querer hablar en el momento menos propicio (justo en el instante que las emociones están candentes). Espere que pase un momento, busque un instante propicio, y si es posible haga algo que vaya facilitar la conversación como salir a caminar, una cena, un lugar para un café, etc.
- Permita de Dios obre: Mientras Ester y todos los judíos oraban, y mientras la incertidumbre del rey crecía por saber que estaba pasando; Dios obró en la vida del rey Asuero entre la primera y la segunda cena, ya que Ester invitó a una segunda cena para mantener el incremento del interés del rey (Ester 5:6-8). Dios en esa noche puso inquietud en el rey para obrar en beneficio de Mardoqueo por un favor que había hecho, lo que preparó el corazón de Asuero para escuchar la petición de Ester. Antes de conversar, permita a Dios que obre en la persona. Recuerde, si usted está orando para que Dios obre, pues permitamos que lo haga.
- Presente el problema: Toda esta preparación acompañada con la oración permitieron que Dios obrara en el corazón del rey Asuero y disponga su atención para escuchar el pedido de la esposa, lo que condujo en la liberación de los judíos y el castigo de Amán, su enemigo (Ester 7:2-7). Dios obró en favor de Ester de la misma manera que puede obrar en favor de la conversación con nuestra pareja, nuestros hijos o nuestros padres.
Estos cuatro pasos no son un esquema fijo a seguir; pero de seguro nos dan unas pautas valiosas que nos pueden ayudar. El dialogo puede parecer complicado, pero no imposible si dependemos de Dios y obramos con prudencia.
Proverbios 25:11
“Manzana de oro con figuras de plata ES LA PALABRA DICHA COMO CONVIENE.”
Amén 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona