Génesis 27:1-13
“Aconteció que cuando Isaac envejeció, y sus ojos se oscurecieron quedando sin vista, llamó a Esaú su hijo mayor, y le dijo: Hijo mío. Y él respondió: Heme aquí. Y él dijo: He aquí ya soy viejo, no sé el día de mi muerte. Toma, pues, ahora tus armas, tu aljaba y tu arco, y sal al campo y tráeme caza; y hazme un guisado como a mí me gusta, y tráemelo, y comeré, para que yo te bendiga antes que muera. Y Rebeca estaba oyendo, cuando hablaba Isaac a Esaú su hijo; y se fue Esaú al campo para buscar la caza que había de traer. Entonces Rebeca habló a Jacob su hijo, diciendo: He aquí yo he oído a tu padre que hablaba con Esaú tu hermano, diciendo: Tráeme caza y hazme un guisado, para que coma, y te bendiga en presencia de Jehová antes que yo muera. Ahora, pues, hijo mío, obedece a mi voz en lo que te mando. Ve ahora al ganado, y tráeme de allí dos buenos cabritos de las cabras, y haré de ellos viandas para tu padre, como a él le gusta; y tú las llevarás a tu padre, y comerá, para que él te bendiga antes de su muerte. Y Jacob dijo a Rebeca su madre: He aquí, Esaú mi hermano es hombre velloso, y yo lampiño. Quizá me palpará mi padre, y me tendrá por burlador, y traeré sobre mí maldición y no bendición. Y su madre respondió: Hijo mío, sea sobre mí tu maldición; solamente obedece a mi voz y ve y tráemelos.”
Complot es el “acuerdo secreto entre varias personas para realizar una acción contra alguien, especialmente contra el Estado o una autoridad” (Diccionario Vox).
Isaac, ya de edad, estaba preparándose para bendecir a su hijo mayor Esaú antes de su muerte, ignorando lo que Dios había dicho a Rebeca de que Jacob será quien gobierne a Esaú (Génesis 25:23). Además, Esaú había vendido su primogenitura a su hermano Jacob por un plato de lentejas (Génesis 25:33) y llevado por su carnalidad se había casado con una mujer que traía pesar a sus padres (Génesis 26:34-35).
Por su parte, pasando por alto el liderazgo de Isaac, Rebeca decide hacer sus propios planes para que con engaño su hijo Jacob sea quien reciba la bendición de primogénito. Pide a Jacob que vaya y mate un par de cabritos para dar de comer a Isaac, y aprovechando su ceguera, llegue a bendecir al menor en vez de Esaú.
Es triste ver como los cuatro miembros de la familia, los dos padres y los dos hijos, llevados por malas decisiones actuaron en contra de la autoridad de Dios. Isaac, por decisión propia, ignorando la voluntad de Dios, decide bendecir a Esaú llevado por su favoritismo. Rebeca, menospreciando el liderazgo de Isaac y aprovechando la ceguera de él decide engañarlo para que la bendición llegue a su hijo favorito, Jacob. Esaú, menospreciando su rol de primogénito pasa su liderazgo a su hermano Jacob ofreciéndolo a cambio de un simple plato de comida. Y Jacob, llevado por su ambición escucha a su madre y acepta cooperar con el plan para mentir, menospreciando a su padre. Todos, yendo en contra de Dios, hicieron lo que no era bueno.
Aunque, el acto de Rebeca y Jacob es un acto directo contra el liderazgo de Isaac, todos ellos actuaron directamente en contra del liderazgo y la voluntad de Dios.
Cualquiera que vaya en contra de las normas establecidas y los roles que cada uno debe cumplir en la familia está en complot contra el Señor. No importa su papel en la familia, su responsabilidad es seguir el plan establecido por Dios para cada uno, en amor y obediencia al Señor, y a los otros.
«Señor, ayúdame a entender y cumplir con rol que Tú me has dado en mi familia»
Efesios 5:21
“Someteos unos a otros EN EL TEMOR DE DIOS.”