Lucas 6:12-16
“En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios. Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles: a Simón, a quien también llamó Pedro, a Andrés su hermano, Jacobo y Juan, Felipe y Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Simón llamado Zelote, Judas hermano de Jacobo, y Judas Iscariote, que llegó a ser el traidor.”
Cuando estamos a punto de tomar decisiones importantes muchos optan por buscar a Dios para que les ayude a saber Su voluntad, mientras que otros oran para que bendiga lo que ellos ya han decidido hacer. ¿Cuál de estas opciones es la correcta? Por su puesto que la primera.
Jesucristo, siendo el Hijo de Dios, “pasó la noche orando” para recibir ayuda del Padre y así decidir exactamente lo que tenía que hacer (Lc 6:12). Estaba por escoger a los doce hombres que serían seleccionados para pasar el resto Su ministerio con Él. Lo que nos muestra en el pasaje, es que aparentemente eran más de doce los que les seguían, pues, “cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles” (Lc 6:13).
Dentro de esta elección especial estarían quienes cumplirían como apóstoles de la Iglesia. Pero en esta selección, se destaca el nombre de Judas Iscariote, quien como lo expresa el pasaje, “llegó a ser el traidor” (Lc 6:16). No hubo equivocación, dentro de la soberanía de Dios estaba contemplado que Judas haya sido elegido para que se llegase a cumplir las Escrituras, todo estaba dentro del Soberano Plan de Dios, y Jesús lo sabía (Jn 17:12; Hch 2:23). El Señor pasó tiempo en oración para buscar la guía de Dios y para entender Su voluntad plena.
Es importante recordar que nuestras mejores decisiones siempre se darán cuando con corazón sincero busquemos la guía de Dios. Nuestro Padre amoroso siempre estará dispuesto a ayudarnos para que podamos conocer Su voluntad, no importa cuán sencilla pueda ser nuestra inquietud (Sal 25:14, 15).
Cuando usted pide dirección a Dios, no les está pidiendo que le bendiga en lo que ha planeado, lo que hace es preguntar si lo que está deseando hacer es correcto, entonces Su respuesta es la bendición que necesitamos escuchar, sea esta “Sí” o “No”. La respuesta de Dios siempre será positiva, a nuestro favor, pues siempre tendrá el propósito de ayudarnos. Muchos podemos pensar que un “No” del Señor es algo malo, cuando es completamente bueno, pues viene con el cuidado del Señor, ya que está cuidando su futuro.
Aun en las cosas cotidianas de la vida, nuestra dependencia en la oración nos ayudará a tomar decisiones apropiadas, mucho más, cuando esas decisiones son importantes. Nunca menosprecie el tiempo que pase orando preguntado al Señor que hacer, pues Él siempre se dará tiempo, a Su tiempo, para responder lo que usted debe hacer.
Dios usará la Biblia y la oración principalmente para mostrarle lo que debe hacer, pero también puede usar las circunstancias y a otros creyentes piadosos para guiarle; pero siempre en ese orden. Debe tener fe para escucharlo, y confianza para seguirlo.
«Gracias Dios por ayudarnos a conocer Tu voluntad»
Salmos 25:14
“La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, Y a ellos hará conocer su pacto.»