¿Por qué no entiendo la Biblia?

Este pasaje nos habla de un grupo de personas que escucharon las enseñanzas de Jesús, pero a quienes no se les dio la gracia de comprenderlas, porque su corazón estaba endurecido y no lograban percibir la realidad espiritual que hay en ellas…

¿Qué debo hacer para entender la Biblia?

Pues en este pasaje Jesús nos explica por qué podemos entender su palabra, mientras hay otros que no lo pueden hacer; y es porque nuestro entendimiento de ella depende de la gracia y la voluntad de Dios. Sabemos esto porque Jesús lo dijo, afirmando que a ellos se les había dado saber los misterios del reino de Dios, mientras que a los de afuera no…

¿En qué nos parecemos a los Apóstoles?

Normalmente pensamos que Dios obra indiscriminadamente, pero eso no es así, porque todo lo que Dios hace siempre responde a su plan redentor en el mundo, y el llamamiento de los doce ilustra esta verdad…

¿Cómo debo tratar el error involuntario?

¿Cómo reacciona usted ante el error involuntario de otra persona? Aunque no debería ser así, pero muchos de nosotros reaccionamos con severa indignación cuando una persona nos hay ofendido o afectado de manera involuntaria. La ira es una de las respuestas más rápidas y descontroladas que tenemos, llevándonos a actuar inapropiadamente.

Reconoce y adora Su misericordia

Nunca debemos olvidar que Dios es un Dios perdonador, Quien se enoja ante nuestro pecado, pero que está presto a perdonar y a restablecer Su relación con nosotros. Reconocer Su misericordia es motivo de adoración. Dios es bueno, justo, paciente, amoroso. Nosotros también podemos presentarnos a Él con manos limpias y postrarnos ante Su presencia y adorarle por Su eterna misericordia en favor nuestro. Si últimamente ha pecado y a pedido Su perdón, recuerde que Dios ya le perdonó, ahora adórele por Su misericordia.

“Borrón y cuenta nueva”

¿En algún momento se ha sentido desalentado por algún fracaso en su vida o algún pecado que trajo consigo un castigo y pérdida? Ese sentimiento de seguro fue terrible. Con ese evento pudo venir a su vida dolor, frustración, falta de autoestima, temor, desconfianza, enojo consigo mismo, etc. Son sentimientos muy fuertes que menoscaban nuestro ser llevándonos muchas veces a la depresión y el miedo.

Una fe que salva

Lo único que nos pueda otorgar perdón es la gracia y la misericordia de Dios por medio de la fe. La fe nos justifica (Ro. 5:1), nos otorga el perdón (Hch. 26:18), nos da vida eterna librándonos de la condenación (Jn. 3:16-18, 36), y nos permite entrar en la familia de Dios (Jn. 1:12).

Su “gracia” es todo lo que necesitamos

Comprender que Dios sabe lo que pasa, que Él está en el control de todo, que siempre hay un propósito detrás de ello para nuestra vida, y que, si es necesario, Él mismo nos proveería de Su poder para seguir adelante es importantísimo para enfrentar los problemas con gozo y seguir sin desanimarnos.