Presencia condicionada, resultado maravilloso

Cuando hay pecado en la iglesia, y las personas permiten que la carnalidad se manifieste ante las dificultades y los problemas interpersonales (Ga. 5:19-21), las divisiones son evidentes, generando una pérdida de comunión con los demás hermanos y con Dios (1 Jn. 1:6-8).

Convirtámonos en cristianos “negociantes”

La mina de la que se nos habla en esta parábola era una moneda que equivalía a tres meses de salario de una persona, y cada uno de los diez siervos de este Noble recibió una, con la orden de que negociaran con ella para que cuando este hombre regresara hallara ganancia sobre su inversión…

Esperando por nuestro reino

Jesús comprendía muy bien la tensión que había en el ambiente debido a que el ánimo de la gente que caminaba junto a Él era de expectativa, ellos pensaban que: el reino de Dios muy pronto aparecería; y que estaban marchando con el Rey…

Analizando mi salvación y viviendo acorde

El día de la salvación marca un antes un después eterno en la vida de un creyente (2 Co. 5:17). El momento que esa persona recibe por fe el regalo inmerecido del perdón de pecados y la vida eterna al depositar su fe en Cristo como su único y suficiente Salvador, ese creyente entra a experimentar una vida espiritual real como resultado de la obra purificadora y regenerativa del Espíritu Santo (Tit. 3:5).

¿Hasta cuándo la falta de arrepentimiento?

La falta de arrepentimiento es un factor crucial en la falta de madurez. Un creyente inmaduro, por su falta de una apropiada relación con Dios, y por permitir que su carnalidad se manifieste constantemente, hace que él mismo no pueda discernir apropiadamente las cosas espirituales. No solo que no ve al pecado como debería hacerlo, sino que no puede discernir correctamente las enseñanzas ni a las personas que enseñan (1 Co. 3:2; Ef. 4:14; He. 5:11-14; 13:9).

¿El sueldo del pastor es una carga en la iglesia?

Muchas de las iglesias todavía no han aprendido a cuidar dignamente del pago de un sueldo merecido de un pastor o misionero. En otros casos, muchas de las personas que desean servir en las iglesias quieren explotar o aprovecharse de las congregaciones para obtener beneficio financiero en forma desmedida. En ambos casos no hay una perspectiva apropiada de lo que es «servir a Dios».

Su “gracia” es todo lo que necesitamos

Comprender que Dios sabe lo que pasa, que Él está en el control de todo, que siempre hay un propósito detrás de ello para nuestra vida, y que, si es necesario, Él mismo nos proveería de Su poder para seguir adelante es importantísimo para enfrentar los problemas con gozo y seguir sin desanimarnos.

¡Vivamos con lo necesario para ser “ricos”!

Según Tito 2.11-12 esa es la forma en la que somos llamados a vivir, este pasaje resume lo que significa vivir sobriamente. Con esto no quiero decir que no podamos disfrutar de las bendiciones de Dios, sino que nuestro corazón desee agradarlo aun por encima de las riquezas, el confort y las excentricidades.