Muchos de nosotros no conocemos plenamente todo lo que un siervo fiel sufre por servir a Dios, pero si debemos recordar que ellos batallan diariamente en contra de sus pecados, frustraciones y sufrimientos para cuidar y alimentar del rebaño del Señor.
Archivo de categoría: Vida Cristiana
Consideraciones iniciales
Cuando inicia una nueva etapa en la vida cada uno nos detenemos a meditar en todo lo que nos viene por delante, y aunque cada año nuevo llega cada 365 días, siempre su llegada nos presenta una nueva oportunidad para iniciar algo que no hemos hecho nunca, retomar algo que no completamos, o decidimos hacer unos cambio positivos o superiores a lo ya vivido. Que bueno que hay un nuevo inicio, pues nos da una oportunidad de hacer consideraciones especiales al inicio.
Jesús nos redimiría de nuestros pecados
Mirar hacia el pesebre en Belén es mirar el plan de redención de Dios, encarnado en Jesús, y cumplido posteriormente por Su muerte en la cruz. El Hijo de Dios emprendió Su viaje de dolor, su motivación era más fuerte que el tormento que sufriría, esa motivación era Su inmenso amor por el pecador. Por ello el salmista lleno de confianza alentaba a Israel a esperar en Jehová, porque en Él “hay misericordia” y “abundante redención”, el Mesías venía a redimir a Israel “de todos sus pecados” (Sal 130:7, 8).
Jesús llegó al pesebre siendo Rey Eterno
Jesús, el hijo de David (Lc 1:32), nacería muchos años después en la misma ciudad que su padre terrenal (Lc 2:11), y bajo su linaje venía a reinar y tomar el trono prometido. Lo maravilloso de este Rey Soberano, es que al igual que Su antecesor, nació humildemente, no en medio de grandes galas, sino en un sencillo pesebre, pero las huestes celestiales anunciaron majestuosamente al mundo su nacimiento (Lc 2:10-14), y el cielo se llenó del esplendor por la estrella que proclamaba su llegada, pues venía a reinar (Mt 2:1, 2).
Jesús descendió para cumplir la voluntad del Padre
Jesús nació en Belén, siendo hijo de David, cumplió la voluntad plena de Dios Padre. Celebramos navidad porque recordamos el nacimiento de Aquel que vino a la tierra, se hizo Hombre, y decidió cumplir con la buena voluntad de Dios que trajo favor al pecador.
Jesús vino para ser escuchado
Jesucristo vino como Profeta con poder trayendo el mensaje de Dios, las buenas nuevas de liberación (Mt 11:5; Lc 4:16-21), y es a Él a quien todo hombre debe poner atención y creer.
Jesús vino y fue rechazado
Si Cristo no hubiera nacido, no hubiera sido rechazado, no hubiera sido crucificado, no hubiera resucitado, no hubiera para el hombre salvación. Celebrar Su nacimiento, es celebrar y no rechazar, Su deidad y propósito con Su venida.
Jesús trajo justificación y vida
Jesucristo tenía que nacer para cumplir la promesa hecha en Edén y así brindar justificación y vida eterna al hombre. Celebramos Su nacimiento, porque Su encarnación nos trajo perdón, justificación y vida eterna. La justificación y la vida eterna son un regalo que Dios otorga solamente a quién confía en Jesucristo como su Redentor (Ro 3:22-24).
